Vivió con un lobo pensando que era un perro

En Quiniela de Leirado, un pueblo gallego de Orense, vivía un hombre acompañado por el que consideraba su perro, su animal de compañía. Todos sus papeles estaban en regla, y el animal había sido inscrito como un Pastor lobo checho. Lo que no sabía es que en realidad se trataba de otra especie: convivía con un lobo ibérico.

Quién se lo iba a decir a este hombre. El que hasta entonces era su compañero, su fiel amigo, respondía a los instintos de una especie feroz, un lobo ibérico. Un ejemplar que contaba incluso con el chip identificativo reglamentario, tal como han confirmado desde el Seprona, cuyos agentes realizaron toda la investigación.

Después de inspeccionar y proceder a la recogida de una muestra biológica de carácter indubitado, el perfil genético de los restos biológicos analizados confirmó que se trataba de un ejemplar de Canis Lupus Signatus, un lobo ibérico.

El propio dueño voluntariamente entregó al animal al Servicio de Patrimonio Natural de la Consellería de Medio Ambiente de la Xunta de Galicia, despidiéndose así del que había sido hasta entonces su compañero.

¿Cómo es el lobo?

El lobo es el miembro no doméstico perteneciente a la familia de los perros (Canidae). Un animal fuerte, caracterizado por su valentía, del que se cree que sobrevivió a la edad de hielo, pudiendo tener su especie una antigüedad de 300.000 años.

Existen varias subespecies, pero los científicos no se ponen de acuerdo en el número de ellas, habiendo numerosos híbridos.

Algunas de las curiosidades más características del lobo son las siguientes:

- Alcanza unos dos metros de longitud, incluyendo la cola de medio metro de largo. Pesa alrededor de 45 kg, siendo la hembra más pequeña que el macho.

- Son resistentes y su cuerpo está hecho para largos viajes. Profundo pecho, patas largas, sentizos agudos y grandes dientes. Pueden perseguir a presas a 60 km/h.

- Su pelaje está formando por un pelo grueso necesario para lobos que habitan cerca del círculo polar donde las temperaturas son extremas. Los individuos de color claro son comunes en las regiones árticas.

- "La fuerza del lobo está en la manada". Así es. Este animal se agrupa en manadas amplias. Cada una de ellas puede tener entre seis y 10 miembros. Suelen estar compuestas por un macho y una hembra dominante y sus descendientes.

- Mantienen una jerarquía que les permite tener un orden establecido. Las hembras cuidan y decienden a sus cachorros, mientras los machos realizan largos viajes en busca de alimento.

- Utilizan sus aullidos para contactar entre ellos y fortalecer lazos sociales entre sus miembros.

- Son carnívoros y se alimentan de animales grandes, pero también pequeños si lo necesitan. Ciervos, bisontes, borregos o bueyes son algunas de sus presas, que suelen cazar en manada hembras y machos.

- Se reproducen entre febrero y abril, y una camada de cinco o seis crías nace en primavera, en un agujero natural o madriguera.

El lobo, en peligro de extinción

El lobo ha sido exterminado de sus zonas de distribución mediante la caza, el envenenamiento y las trampas para obtener sus pieles y proteger la ganadería.

Este majestuoso animal cada vez cuenta con menos territorio y con un menor número de presas para alimentar a toda su manada, por lo que se acerca a las zonas de ganado, provocando una gran crispación entre los ganaderos.

Las limitaciones que sufre, además, le obliga a producir una fuerte endogamia, muy perjudicial para el futuro de la especie. ¿Seremos capaces de proteger al lobo antes de que sea tarde? ¿O seremos la causa de la extinción de un animal que ha sobrevivido durante cientos de miles de años?