Otro lince muerto a tiros en Córdoba

Su cadáver ha sido hallado en avanzado estado de descomposición, pero su identificación ha sido sencilla ya que aún portaba el collar con equipo radiotransmisor que se le colocó en su liberación. Este lince ibérico era conocido como Gael. Su historia ha tenido un triste final similar al de otros de su especie: ha fallecido a tiros en los bosques de Córdoba.

Fotografía del lince Gael, muerto por disparos

Nació en 2010 y habitaba los bosques de Guadálmellato (Córdoba) desde 2011. Fue en ese año cuando fue liberado junto a Galán dentro de los trabajos del proyecto Life-Iberlince de recuperación de la distribución histórica del lince en España y Portugal.

Una finca de Villafranca de Córdoba fue testigo de su muerte. Allí han hallado su cuerpo sin vida, presentando disparos posiblemente de escopeta de caza, tal como ha confirmado el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil.

El cuerpo del animal ha sido trasladado al Centro de Análisis y Diagnóstico (CAD) de la Fauna Silvestre de la Junta de Andalucía donde se le practicará la necropsia que concretará con mayor exactitud las causas de su muerte.

Una víctima más

Aunque las cifras de cría en libertad y de recuperación del lince ibérico son positivas, la historia de Gael se suma a una larga lista de muertes de linces desde que comenzaron los programas de repoblación.

Lo más habitual es que estos animales, en grave peligro de extinción, fallezcan por atropellos en las carreteras, pero sin duda los casos más lamentables son aquellos de los que fallecen por herida de bala.

Nenúfar o Marvel son algunos de sus trágicos precedentes. Marvel murió en diciembre de 2018 después de recibir “un disparo a bocajarro”, según denunció el propio director del programa Life + Iberlince, Miguel Ángel Simón. Este ejemplar también vivía en Guadalmellato (Córdoba) y también fue identificado gracias al radiocollar que llevaba.

En los Montes de Toledo también se han producido incidentes similares recientemente. Nenúfar perdió la vida el pasado verano también a causa de varios disparos. Sus cuatro crías probablemente fallecieron poco después debido a la ausencia de su madre.

Ahora la protección se torna fundamental para la consecución de los objetivos de este programa de recuperación del lince ibérico, así como la concienciación y educación en el respeto de estos animales.