Era un cetáceo tan sociable y cercano con las personas, que hacía a los expertos plantearse la “peligrosidad” de su actitud. Ahora, poco o nada queda de ese delfín amigable que quería aproximarse a todo aquel que se cruzase en su camino. El delfín Manoliño, conocido por todos los vecinos de las costas gallegas, ya no quiere acercarse a nosotros. La vida parece haberle enseñado que se estaba topando con el depredador más peligroso de la Tierra: el ser humano.
Hace unos días saltaba la noticia: el delfín Manoliño había sido atacado con un arpón. Lo llevaba -y lleva- clavado en uno de sus costados. Los expertos de la ONG CEMMA, Coordinadora para o Estudo dos Mamíferos Mariños, han intentado en dos ocasiones retirárselo, sin suerte.
Los especialistas de esta organización han informado a través de sus perfiles de las redes sociales sobre la última hora de los trabajos de rescate. El último intento ha sido con una red de fútbol, procurando acercar al animal al muelle de O Freixo para poder extraerle el arpón. Su desconfianza lo ha hecho imposible.
La única buena noticia en este popular caso es que, según los responsables de CEMMA, el animal “sigue con fuerza y nada con normalidad” gracias a que el arpón no ha alcanzado sus órganos vitales.
Desde CEMMA solicitan a la ciudadanía que esté atenta ya que es muy probable que Manoliño intente quitarse el hierro rascándose contras las paredes del muelle o con otras superficies de la zona, pudiendo hacerse aún más daño. Los biólogos del equipo han asegurado que seguirán pendientes de su evolución y tratando de quitarle el arpón.
La pregunta del millón en este caso es la siguiente: ¿por qué no sedan a Manoliño para poder extraerlo? Esto se debe a que los delfines tienen la respiración como un acto voluntario, no reflejo, por lo que siempre deben estar conscientes para mantenerse con vida.
Seguiremos de cerca el caso del delfín Manoliño, confiando en que, poco a poco, vuelva a aproximarse al ser humano y permita que los especialistas extraigan el arpón que le robó su confianza en nosotros.
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