"El consumo de carne debería reducirse a la mitad"

El consumo de carne en España alcanza los 52,3 kilos por persona al año, según un informe de la organización Amigos de la Tierra, lo que supone el 45 % de la huella climática en este país. Una cifra que desde esta ONG califican de “insostenible” atendiendo a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, que dicen que el consumo de carne debería reducirse a la mitad.

Desde esta asociación se apuesta por un cambio del modelo industrial de producción, con una ganadería extensiva, ecológica y ligada al territorio.

“Las políticas públicas deben ir encaminadas a posibilitar esta transición agroecológica, por el clima, por el medio ambiente y por la salud de las personas”, sostiene Andrés Muñoz, responsable de Soberanía Alimentaria de la ONG, para quien “es prioritario aumentar el consumo de legumbres y cereales, que junto con las verduras, hortalizas y frutas locales y de temporada deben ser la base de la dieta habitual para cumplir con criterios de respeto al medio ambiente”. Además, según el citado informe, el cambio de dieta supondría una “reducción de la mortalidad mundial en más de 12 millones de personas al año”.

Por otro lado, según el documento, la industria cárnica, además de suponer un peligro para la salud, fomenta la deforestación en la Amazonia por contribuir a la tala de árboles en la selva más rica y diversa del planeta. Amigos de la Tierra alerta del riesgo de los tratados comerciales de la Unión Europea y Mercosur, ya que posibilitan que se “pierda fácilmente la pista” a las importaciones que se realizan desde Brasil.

La industria de la carne de aves y cerdos también supone otro problema al expulsar dióxido de carbono a la atmósfera a través del consumo de piensos degradando el ecosistema natural.

De acuerdo a estos datos, según Naciones Unidas, los costes sanitarios “relacionados con la dieta en 2030”, tendrán un impacto económico de 1,3 billones de dólares al año.