¿Os imagináis que la guardería donde dejáis a vuestra mascota os la devolviera sin vida y empaquetada? Una auténtica pesadilla. Eso es lo que le ocurrió a Kirsten Kinch, una joven dublinesa que dejó a su Husky tres días en una guardería canina para poder hacer un viaje en familia a Islandia. Todavía no ha superado la muerte de su amiga Nova.
Una perra de 25 kg convertida en una bola empaquetada. Eso es lo que encontró Kinch a su vuelta de vacaciones. Un recuerdo que, desgraciadamente, la acompañará toda la vida. Llevó a Nova al centro P&E Boarding Kennels el 27 de diciembre y regresó para recogerla el 31. En su cuenta de Instagram ha decidido contar lo que sufrió para evitar males como estos a otras familias. "Nos dijeron que Nova había muerto; la habían encontrado esa mañana ensangrentada en su jaula. Nos quedamos impactados, devastados", ha explicado Kinch en su perfil de esta red social. "Habían aplastado a Nova en lo que solo puedo describir como una pelota envuelta en una bolsa negra, cubierta con cinta adhesiva. No había cuidado ni empatía en la forma en que había sido tratada". La imagen habla por sí sola. Podéis deslizar el siguiente post para ver lo que ha compartido su dueña.
En este post Kinch ha explicado que Nova había estado enferma de colitis y estaba siendo tratada con esteroides. Antes de marcharse de vacaciones la llevaron a su veterinaria, que le había confirmado que el tratamiento estaba siendo efectivo. Antes de dejar a su perra en P&E Boarding Kennels la joven se había asegurado de que en este centro se encargarían de suministrar la medicina a su Husky. "Les di instrucciones escritas y verbales", asegura en su relato de Instagram. Desde P&E Boarding Kennels aseguraban a Kinch que Nova recibió el tratamiento durante aquellos tres días.
La joven llevó el cadáver de su can a la veterinaria: "Estaba horrorizada, y no podía creer que hubiera un husky de 25 kg en aquella bola", ha relatado, pero el chip confirmó que se trataba de su mascota. "Nova ha dejado un agujero que será imposible de llenar, la echo de menos cada día y espero que escribir esto pueda detener una situación similar en el futuro".
Miles de personas han empetizado con este caso, del que se han hecho eco decenas de medios nacionales e internacionales. En su última publicación, Kinch ha querido agradecer todo el apoyo que está recibiendo, asegurando que iba a hablar con un responsable de la guardería canina en directo en un programa de radio, pero que, al parecer, "esto cambió en el último momento". Esperamos que, con el respaldo de todos, Kirsten y su familia puedan superar esta pérdida.
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