Agricultura ordena el sacrificio de las 864 vacas del buque Karim Allah

Las 864 vacas que navegan desde hace dos meses por el Mediterráneo en el buque de nacionalidad libanesa Karim Allah serán sacrificadas. Así lo ha ordenado el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación "de acuerdo con la normativa aplicable".

Si la empresa no procede a su ejecución, será el propio Ministerio de Agricultura el que se haga cargo. Las pruebas veterinarias efectuadas los días 25 y 26 de febrero corroboraron que el estado de salud de los terneros "impide que emprendan de nuevo viaje para su exportación a un país tercero".

El Karim Allah salió del puerto de Cartagena el 18 de diciembre para exportar las reses en Turquía. Sin embargo, tras llegar al puerto turco, las autoridades rechazaron la entrada del barco bajo la sospecha o el miedo a que el ganado estuviera infectado por la enfermedad de la lengua azul, muy extendida en Europa.

Según la Organización Mundial de Sanidad Animal, "la lengua azul es una enfermedad vírica que afecta a los rumiantes domésticos y salvajes" y no se contagia a los seres humanos.

Después de este primer rechazo, el buque no tuvo más remedio que regresar a Cartagena, en España, su puerto de origen. Esto provocó la polémica con el Ministerio de Agricultura. Cuando el buque se acercaba a la ciudad portuaria, Agricultura comunicó a la embarcación que tenía prohibido entrar en territorio español porque, según la normativa vigente, si el barco atracaba, los animales serían descargados y sacrificados, y el coste de la operación lo asumiría la empresa encargada del transporte y la exportación.

Tres días después, el jueves 25, el Ministerio permitió atracar al buque en Cartagena, tras lo cual se sometería a los animales a pruebas para conocer su estado de salud.

Finalmente, EFE ha dado a conocer el resultado de las pruebas y del informe: en lo relativo a las condiciones de los animales en el barco, el informe refleja que, según una inspección visual, el 85% presenta afectaciones cutáneas, presuntamente por infección fúngica, y que en una "gran cantidad" sufren alteraciones digestivas. En algunos ejemplares también han detectado sarna.

Según dicho documento, en el buque se respetan las densidades máximas en los corrales, hay un correcto estado de limpieza y un buen funcionamiento de los bebederos, pero no hay comederos en los corrales y hay escasez de camas de paja.

El informe concluye que, los terneros no tienen signos críticos que "supongan compromiso o riesgo vital a corto plazo para los animales". A pesar de esto, el informe ha determinado, por motivos de salud animal y debido a la imposibilidad de que los ejemplares vuelvan a ser vendidos a terceros, el sacrificio de las reses.

Otro buque espera una decisión

El buque Elbeik, con bandera de Togo, partió de Tarragona también en diciembre transportando 1.776 cabezas de ganado bovino con destino a Turquía. Ante la negativa de Turquía, se intentó vender el ganado en Libia, pero la transacción no consiguió cerrarse.

Cuando llegó a Trípoli el 10 de enero, las vacas fueron rechazadas por el mismo motivo. Desde entonces, el Elbeik ha pasado por aguas de Italia, Egipto y Chipre. En la actualidad, el buque está en Famagusta (Chipre), esperando a que las autoridades chipriotas lo inspeccionen.

En ambos casos, los animales partieron de sus puertos de origen sanos y en buenas condiciones para su venta, pero el miedo a la enfermedad infundado por los países de Medio Oriente viene precedido de las dudosas condiciones higiénicas de los barcos en un viaje tan largo para tantos animales.

Silvia Barquero, directora nacional de Igualdad Animal, ha reiterado que llevan meses pidiendo la prohibición de esta índole de transportes al Gobierno de España. "No se puede asegurar el bienestar de las reses una vez salen del puerto, y este tipo de viajes implican un maltrato evidente para ellos", ha manifestado Barquero.

Igualdad Animal ya realizó el año pasado una investigación que documentó cómo se trataba a los corderos que fueron comercializados a Arabia Saudí desde Cartagena, "a los que se tiraba de las orejas, se les daba patadas". En 2019 un barco similar partió de Rumanía y se hundió con 20.000 ovejas a bordo.

Esta ONG pide la colaboración ciudadana firmando en esta petición para terminar con estos largos viajes de exportación de animales vivos. Más de 2.000 millones de animales de granja padecen viajes de larga distancia cada año y muchos mueren durante el trayecto.